标题:Sodoma y Gomorra
艺人:Tierra Santa
专辑:Tierras de Leyenda
作词:Tierra Santa
作曲:Tierra Santa
节拍:♩ = 146
音轨:
- Voz - 中音萨克斯 Alto Sax
- Ritmica - 低音刷音 Scratch 1
- Lead - 低音刷音 Scratch 1
- Teclado - 中高音嗵鼓 Hi-Mid Tom
- Bajo - 节拍器 Metronome Click
- Bateria - 敲击乐器
注释:Hubo una tierra devicio y maldadHija del pecado delhom - breQue fu condenada a una pla-ga infernalPor el mismo que la cre - Ya lleg el momento del juicio finalLa hora de rendir las cuen - tasY el Dios implacable no ha de perdonarTanto pecado y trai -- ci髇Y en la noche llegY se cumpli su des ti noY del cielo bajY les dej su cas ti -goPero un hombre se ha de salvarY a los suyos se llevarCon una condici髇Nunca mires a --- tr醩.... Sodoma y GomorraLa tierra de un Dios Que nunca supo aceptarSu falso dere--cho a la liber tad... Sodoma y GomorraLa tierra de un Dios Que nunca supo aceptar Su falso dere--cho a la liber tad...Y ese hombre que huyA sus hijas ne-----gLa elecci髇 de poderElegir la pa ----si髇Y en la noche lo embria---ga-----r醤Y dos hijos con 閘 ten-----dr醤Y de nuevo otra vezTodo vuelve a empe------zar Sodoma y GomorraLa tierra de un Dios Que nunca supo aceptarSu falso dere--cho a la liber tad... Sodoma y GomorraLa tierra de un Dios Que nunca supo aceptar Su falso dere--cho a la liber tad...
标记:IntroVerso 1Verso 2Verso 3Pre-CoroCoroSoloVerso 4Pre-Coro 2CoroFinal
歌词:
Hubo una tierra de vicio y maldad
Hija del pecado del hombre
Que fué condenada a una plaga infernal
Por el mismo que la creó
Ya llegó el momento del juicio final
La hora de rendir las cuentas
Y el Dios implacable no ha de perdonar
Tanto pecado y traición
Y en la noche llegó
Y se cumplió su destino
Y del cielo bajó
Y les dejó su castigo
Pero un hombre se ha de salvar
Y a los suyos se llevará
Con una condición
Nunca mires artás
Sodoma y Gomorra
La tierra de un Dios
Que nunca supo aceptar
Su falso derecho a la libertad
Y ese hombre que huyó
A sus hijas negó
La elección de poder
Elegir la pasión
Y en la noche lo embriagarán
Y dos hijos con él tendrán
Y de nuevo otra vez
Todo vuelve a empezar
Sodoma y Gomorra
La tierra de un Dios
Que nunca supo aceptar
Su flaso derecho a la libertad